miércoles, 12 de agosto de 2009

DISFRAZ SORPRESA

Frente al espejo, me pruebo mi antiguo uniforme de la secundaria, un jumper gris que hice acortar por encima de mis rodillas, una camisa celeste agua, una corbata bordó. Me peino con dos trenzas, como en aquellas épocas y me miro al espejo de cuerpo entero… no obstante, no me satisface el resultado. Parezco una niña boba y para nada sensual.

Esta noche debe ser exquisita y no me perdonaré ningún error. Voy al siguiente traje… un kimono largo y colorido, palillos japoneses para el peinado en alto. Maquillo mi rostro de color muy pálido, pinto mis labios carmesí. Tampoco me sienta, soy rubia… y ahora no tengo tiempo de cambiar el color de mi cabello.

Se me está haciendo tarde, tú casi llegas y yo aún no he escogido mi disfraz. Me lo has puesto difícil, mi amor… no me has dicho de qué vendrás disfrazado tú, sólo que sería un encuentro especial, una cita diferente en mi departamento para celebrar mi cumpleaños.

Revuelvo los cajones de mi cómoda y allí encuentro la inspiración. Un diminuto delantal de encaje transparente, rematado con un breve moño rojo. Mmmmmm… con mi osada cola less queda muy sugerente. Esa braguita ínfima que destaca más mis notorias curvas hace juego con el sostén también breve.

Me siento muy desnuda y en parte me cubro con un chalequito negro que, desabotonado, sugiere secretos ocultos debajo, como a ti te place. Sólo resta el peinado y el maquillaje… Ah! Los zapatos y un moño diminuto para el cuello también son detalles imprescindibles que no debo obviar.

Agrego un plumero para completar el atuendo, ¡y listo! Miro el conjunto y me veo sensualmente atrevida… me doy un guiño al espejo, quitando el polvo imaginario a mi alrededor.

El sonido de un claxon me hace dar un brinco. Eres tú quien ha llegado y mi corazón se acelera.
Abro la puerta…

-Pase, caballero. La señora no está en la casa- te digo mirándote con complicidad.

-Mucho mejor. ¡Qué bella mi muchachita! A ver… a ver… - tomas mi mano y me haces girar. Tus ojos sorprendidos no caben en tu rostro cuando me miras la espalda y el trasero provocador.

Discúlpame, mi amor. Nunca más pude recordar de qué venías disfrazado… ¡te duró tan poco la ropa puesta! Casi tan poco como a mí. Sólo recuerdo el dulce sabor de tus besos y el creciente palpitar de mi pecho, en esa noche de verano en que jugamos juntos, a partir de la cual me convertí en la niña del plumero… para ti.

19 comentarios:

aapayés dijo...

Maravilloso escrito.. me quedo con el kimono.. pero con toda tu pasión escrita.. me inclino y aplaudo tu presencia..

BRAVO..

Me gustó-

Siempre es un agrado leerte..

Saludos fraternos
Un abrazo

Unknown dijo...

guauuuuuu !!

que sensual y erótica esta entrada.........
me encanta esa complicidad,para mantener vivo el fuego!!!!!!!!!!

abrazos y besos, diosa

Natacha dijo...

Ay... esas trenzas, jejeje.
Anda vuela, cielo y disfruta...
Un beso, corazón.
Natacha.

Marisa dijo...

Qué sensual y romántico...

¡¡A disfrutar!!

Muy lindo tu post.

Besos.

I. Robledo dijo...

A veces, algunas personas son capaces de aunar sabiamente la mas pura ingenuidad con la mas deliciosa sensualidad...

Son cosas que pasan, pero solo algunas veces, como tu has conseguido hacer..

Un abrazo, amiga

Silvia García dijo...

Que bueno, que bueno, que bueno!!! , se dará así?? eso espero mi querida.
Un abrazo de amor para tí
Silvia

aaaa dijo...

Que suerte poder leerte de nuevo, muy buena la historia, muy sugerente y con un punto divertido,.

bss

Pato´s dijo...

Que historia mas sensual, cuando uno juega con la imaginación , cuantas cosas maravillosas pueden pasar! Realmente me encanto!

Besitos de chocolate:)
Luci que tengas un bello día te kiero mucho amiguita:)

Patricia dijo...

Adolfo, creo que la próxima elegiré el kimono, será interesante ;)
Un abrazo!


Exacto, Adry! Mantener la complicidad, ahí está la clave para que la llama siga encendida.
Besitos, hermosa!

Patricia dijo...

Natacha, pero si las trenzas me las quité! jajaja!
No me gustaba el uniforme escolar ;)
De cualquier modo, vale disfrutar!
Te mando muchos besos!


Gracias, Meret!
Así lo haré, cuando encuentre la ocasión :)
Un beso de colores

Patricia dijo...

Antiqva, qué halago! jajaja!!
Será que en el fondo soy una mezcla de inocencia apasionada...
Un abrazo para vos también.


Silvia, mmmmm... quién sabe!
Al menos en mi fantasía se dio ;)
Gracias, tesoro.
Un beso enorme.

Patricia dijo...

Rafaela, gracias! al menos me divertí imaginándola y escribiéndola.
Sigamos fantaseando ;)
Un besote.


Patito!
Me alegra que te haya gustado.
Recibo tus besitos de chocolate (con lo que me gusta!!), y te mando otros de dulce de leche.

Unknown dijo...

que linda, que sensualidad, me encantó...

Trini Reina dijo...

Es un buen relato. Bien trazado y magnificamente relatado.

Aunque ser la niña del plumero para el amor de nuestra vida, como que ...

Besos

Admin. dijo...

Luci de verás te pasó eso, jajajaj como me gustaría que me pase a mí, nunca me disfracé , sólo algún que otro body pero disfráz para las fantasías no.......
ya veremos nunca digas nunca ....
besotesss buen finde!!!

vision femenina
andrea

Patricia dijo...

Otra vez, gracias!!


Trini, la idea es pasar un momento inolvidable y divertido. Además elegí ese disfraz porque es más fácil de quitar ;)
Besitos.


Andrea, no, no me pasó... sólo en mi fantasía, jajaa!
Podríamos probar "en serio" ;-)
Que pases un hermoso finde soleado.

Catalina Zentner Levin dijo...

Seduce ese estilo inocente y provocador al mismo tiempo... el caballero quedó impactado con razón.

Abrazos,

SUSURU dijo...

qué imaginación y que bueno está el relato!!!

En mi blog tienes un premio para llevarte y compartirlo.
Besos

Patricia dijo...

Sí, Catalina... impactarlo era el objetivo, jajaja!
Gracias, mi bella.


Ahí voooooyyy, Susu!!!!