martes, 25 de abril de 2017

SIN TU AMOR


miércoles, 25 de enero de 2017

CORAZÓN HERIDO

Sentado ante la máquina de escribir, entumecido su cuerpo por largas horas de concentración en aquella tarea, arrancaba la página mal hecha por décima vez y la arrojaba al papelero. Su inspiración de poeta, otras veces productiva y rica, se había disipado y sentía una extraña insatisfacción interior.

Se quitó los anteojos y, mesándose los cabellos con impaciencia, se acercó a la ventana mirando sin ver, escuchando sin oír, perdido en una maraña de pensamientos inconsistentes. Su vocación literaria, que hubiera sentido tan fuerte, parecía evaporarse y lo hacía tambalear y preguntarse si no había equivocado el rumbo. Tal vez ...

Su distracción de pronto se transformó en un fruncir de cejas y en el enfoque de sus ojos mareados hacia la esquina de la cuadra. Las hojas secas habían cubierto la acera, pero algunas jugueteaban con el viento y, elevándose en el aire y formando pequeños remolinos, volvían a caer sin un orden preciso. Y justamente debajo del colchón de hojas asomaba una forma incierta, oscura, palpitante.

El poeta estaba intrigado. Su mirada distraída se convirtió en escrutadora y trataba de adivinar que sería aquello. Bajó la escalera hasta la vereda en cuestión, con pasos lentos pero seguros. Una ráfaga de viento lo envolvió y, al elevarse, se llevó consigo a las hojas quebradizas que tapizaban ese sector y las trasladó a otro tramo.

Pisoteado por los caminantes indiferentes, polvoriento y desgarrado, herido y sufriente, se hallaba el corazón. El poeta se sintió descompuesto y tuvo que sostenerse con firmeza de un poste. Los transeúntes seguían pasando por allí, mirándolo extrañados pero sin interés en comprometerse con ese hombrecito desgreñado y tembloroso.

Y, repentinamente, pasó un rayo de luz por la cabeza del poeta, y comprendió que sólo él podía ver ese corazón moribundo, verlo y sentirlo. Lo llevó consigo, abrigándolo entre sus ropas, y colocándolo después, en el calor de su hogar, sobre un almohadón mullido y suave. El hombre quería saber a quién pertenecía pero creía que eso no era primordial todavía. La prioridad era sanarlo.

La tristeza anidada en su alma le produjo una súbita necesidad de crear una poesía, y las palabras brotaron como lágrimas inundando el papel, vaciando su espíritu lentamente. Al terminar su poema, se sintió en paz. Los versos escritos habían sido inspirados en algún lejano rincón de su alma, desconocido por la melancolía que destilaba. Pero eran suyos, y escribirlos había representado para él una terapia.

El corazón tumbado y silencioso había empezado a recuperar su esperanza, y las grietas se iban cerrando, su palpitar se hacía casi sonoro... Pero el poeta no podía ya verlo, porque su tarea de escribir lo absorbía por completo.

Cuando concluyó su poesía, miró agradecido hacia el sitio de honor donde descansaba el fatigado corazón, pero ya no estaba allí. Había regresado a su verdadero cobijo, había vuelto al pecho que lo apresaría con amor, ya recompuesto y vigoroso, para dedicar a la vida las palabras que brotaban de él, como parte de su esencia misma, como un mágico misterio.

sábado, 22 de octubre de 2016

HOY ME DIGO...

Hoy me miro al espejo, dibujo una sonrisa y me digo que soy valiosa... que mis arrugas son signos de batallas ganadas pero que, aun así, no dejan de reflejar mi verdadera belleza.

Me digo que mi alma trasciende mi mirada y que lo que devuelve son cosas buenas.

Que gané muchos desafíos en la vida y que seré mi propia motivación para lograr más, a partir de hoy.

Para mí… por mí…


Porque tengo mucho para dar y porque estoy receptiva para lo que tenga que llegar.

Porque las viejas heridas cicatrizaron y me besan en el centro del alma, amorosamente, recordándome sus enseñanzas.

Porque decido dejar de lado las expectativas sobre los demás, y así evitaré decepcionarme; porque elijo aceptar la vida tal como es y a las personas así como son, sin pretender cambiar nada ni hacerlos cargo de mis fallos.

Hoy me digo que elijo alinear mente, corazón y acción en todos los órdenes de mi vida, amigando sus controversias para ser auténticamente yo.

Que caminaré de a un paso por vez, saboreando cada segundo, sin mirar atrás y sin anticiparme a lo que vendrá.

Que nunca estaré sola, porque me tengo a mí misma y soy la compañía que siempre tendré.

Que mi fortaleza sigue construyéndose en el día a día, porque Dios vive en mí y respira a través de mí.

Porque sé que yo también soy Universo.



miércoles, 14 de septiembre de 2016

APENAS

Si tienes libres unos minutos, te diré
algo muy simple, algo muy breve.
Solo una cosa quisiera. Una, ¿sí?
O... tal vez, no sea una solamente...
podrían ser dos, o tres... o cinco... o diez
y así y todo, no dejaría de ser solo un número
que podría abarcar apenas
una porción de mi deseo.

Si tienes libres unos minutos, te diré que...
asaltaste mis sueños,
te alojaste en mi mente, en mi pecho y en mi cuerpo,
te convertiste en el apetito que me acosa
desde y hacia todos los frentes.

No pediré mucho. Apenas pido tu boca,
apenas pido tus manos y toda tu piel.
Y deseo tenerte a mi lado para que me descubras
como el hada de tu mundo
adherida a tu sudor, abrazando tus misterios
e impregnándonos de miel.

Tan solo quiero amarte todas las horas
sin mirar qué minuto marca el reloj.
Mirarnos a los ojos y desnudar nuestras almas
con la indescriptible sensación de dejarnos llevar
más allá de todo
más allá del mundo
más allá de los dos.

Entonces, has visto que tanto no pido...
Una sonrisa, un abrazo, un suspiro,
un destello, una caricia, un momento, 
un despertar a la magia, un amanecer.
Y también una canción: la tuya,
a pura emoción. 
Apenas pido... solo eso.




martes, 30 de agosto de 2016

ALLÍ ESTABAS

(Publicado en mi libro Trío Vivo, 2011 ©)


Allí estabas y yo no sabía.
Me espiabas con lujuria
mientras mis ropas caían
para mi rutina de baño.
Allí estabas, espiándome,
con la complicidad de la luna
y el guiño de las estrellas
reflejándose en mis ojos.


Si hubiera sabido…
¡Ay, si hubiera sabido…!
¿Te habría invitado a pasar,
o habría ganado mi pudor?
¿Habría corrido mi cortina
sudorosa, lentamente
ofreciéndote el plato principal
sazonado con espuma…?
¿O habría gritado a la noche
pidiendo socorro?


Allí estabas y lo supe:
“¿Qué esperás? Aquí estoy…”
.
.
.



viernes, 4 de marzo de 2016

VOLVER A AMAR


Oigo afables melodías susurradas desde el viento,
veo palomas serenas surcando índigos cielos.
El arco iris de la vida desvanece los silencios,
calma el alma dolorida y la envuelve con sus besos.

No miro más hacia atrás… el horizonte es perfecto.
Hoy quiero volver a amar sin soltarme de mis sueños.
Ser feliz en cada nota, en cada letra, en cada verso
con esta locura a cuestas, mientras me siento universo.

viernes, 19 de febrero de 2016

LOCURA O DESATINO



¿Qué locura o desatino
me lleva a sentirme viva,
me hace volar a la luna
sin importar el motivo?

No hay palabras acertadas
solo emociones, latidos,
dando vida a la esperanza
y abarcando mi camino.

TODO es hoy, no hay mañana...
Mas sin embargo, te digo:
"¿dónde estarás, amor mío,
que no te encuentro doquiera
mi cantar se vuelva trino?"


martes, 22 de septiembre de 2015

DISFRAZ SORPRESA

(Publicado en mi libro Trío Vivo y primer premio en el concurso de Letras Sensuales)


Frente al espejo, me pruebo mi antiguo uniforme de la secundaria, un jumper gris que hice acortar por encima de mis rodillas, una camisa celeste agua, una corbata bordó. Me peino con dos trenzas, como en aquellas épocas y me miro al espejo de cuerpo entero… no obstante, no me satisface el resultado. Parezco una niña boba y para nada sensual.

Esta noche debe ser exquisita y no me perdonaré ningún error. Voy al siguiente traje… un kimono largo y colorido, palillos japoneses para el peinado en alto. Maquillo mi rostro de color muy pálido, pinto mis labios carmesí. Tampoco me sienta, soy rubia… y ahora no tengo tiempo de cambiar el color de mi cabello.

Se me está haciendo tarde, vos casi llegás y yo aún no he escogido mi disfraz. Me lo has puesto difícil, mi amor… no me has dicho de qué vendrás disfrazado, solo que sería un encuentro especial, una cita diferente en mi departamento para celebrar mi cumpleaños.

Revuelvo los cajones de mi cómoda y allí encuentro la inspiración. Un diminuto delantal de encaje transparente que me regalaste hace algunos años, rematado con un breve moño rojo. Mmmmmm… con mi osada cola less queda muy sugerente. Esa braguita ínfima que destaca más mis notorias curvas hace juego con el sostén también breve.

Me siento muy desnuda y en parte me cubro con un chalequito negro que, desabotonado, sugiere secretos ocultos debajo, como a vos te gusta. Solo resta el peinado y el maquillaje… Ah! Los zapatos y un moño diminuto para el cuello también son detalles imprescindibles que no debo obviar.

Agrego un plumero para completar el atuendo, ¡y listo! Miro el conjunto y me veo sensualmente atrevida… me doy un guiño al espejo, quitando el polvo imaginario a mi alrededor.

El sonido de una bocina me hace dar un brinco. Sos vos quien ha llegado y mi corazón se acelera.
Abro la puerta…

-Pase, caballero. La señora no está en la casa- te digo mirándote con complicidad.

-Mucho mejor. ¡Qué bella mi muchachita! A ver… a ver… - tomás mi mano y me hacés girar. Tus ojos sorprendidos no caben en tu rostro cuando me mirás la espalda y el trasero provocador.

Disculpame, mi amor. Nunca más pude recordar de qué venías disfrazado… ¡te duró tan poco la ropa puesta! Casi tan poco como a mí. Sólo recuerdo el dulce sabor de tus besos y el creciente palpitar de mi pecho, en esa noche de verano en que jugamos juntos, a partir de la cual me convertí en la niña del plumero… para vos.


domingo, 5 de julio de 2015

SOLO POR HOY

Hoy… solo por hoy
quisiera alejarme hasta de mi sombra,
ocultarme en algún resquicio de la tierra,
salirme de mi propio contacto
hasta sacudir el hastío solitario
y acallar los gritos de mi alma.
Tomarme vacaciones de mí misma
y de mi mente exacerbada.
Dormir sin sueños ni fantasmas ni delirios.
Apartarme de mí y de mis demonios.
Reinventarme…

Si lograra esa evasión…
(¡ay, si solo por hoy pudiera!)
ni lo dudaría.
Y si, finalmente, echara de menos
mi propia compañía,
entonces… entonces sí, tal vez,
querría volver a mi lado
y conmigo misma me quedaría.

lunes, 13 de octubre de 2014

CRÓNICA DE UNA MAÑANA INUSUAL

Mucho trueno se avecina.
¿Qué nos depara la noche?
¿Sueños plagados de historias?
¿Ruidos de chapa imprecisos?

Noche de tormenta plena
donde desvelan los monstruos,
donde palpita el suburbio,
y algunas almas ensueñan...




Estaba despierta ya desde antes de que sonara el despertador. La furiosa tormenta que azotaba la región la había sacado de un sueño placentero más de una vez aquella noche. Previendo que sería una jornada más complicada de lo habitual, decidió levantarse antes si quería llegar a tiempo a su trabajo.

Vistió jeans, botitas y piloto. Buscó su paraguas y espió por la ventana que había quedado entreabierta la noche anterior. Todo el pasillo estaba empapado por el agua de lluvia que había entrado por allí. Sopesó las posibilidades que tenía de llegar en buen estado a destino. La calle estaba llena de agua sucia, que desbordaba los cráteres que ya eran parte del paisaje. El pavimento era un lujo vedado en ese barrio, a pesar de algunas promesas de larga data.

Aseguró su calzado atándose bolsas de supermercado hasta las pantorrillas y, desafiando la cortina de agua y el riesgo de resbalarse en el barro, salió de la casa. Tenía dos caminos posibles: a la derecha continuaba la calle de tierra, que en algunos sectores era más baja que la línea de las viviendas, lo cual hacía prever que estaría bajo el agua; a la izquierda, un tramo breve de tierra pero luego pavimento.

Optó por la segunda, que implicaba un camino más largo, pero supuestamente menos fangoso. Al cabo de cinco minutos se arrepintió de su elección: había olvidado que a dos calles de allí pasaba un arroyito y que solía desbordarse en días más amigables que aquel. Solo diez pasos bastaron para que las bolsas con que pretendía proteger su calzado se hincharan de agua sucia y flotaran indiferentes. Un coche pasó a su lado a demasiada velocidad y la salpicó por el costado, traspasando su piloto azul, más indiferente aún.

La siguiente esquina fue decisiva. A pesar de intentar esquivar las lagunitas que se habían formado, hundió su pierna en un desnivel inesperado. Primero fueron las botitas, luego el piloto, ahora el jean. Y por último, el paraguas no alcanzaba a cubrir la poca superficie seca de su cuerpo. La furia de la lluvia se había ensañado esa mañana con todo y con todos: atacaba de costado, impulsada por el capricho de la sudestada. 

Y así, empapada de la cabeza a los pies, sin poder avanzar más, decidió volver al calor de su hogar. Al menos no se podía negar que lo había intentado.



viernes, 3 de octubre de 2014

EL ÁNGEL QUE SUEÑO

Sonia estaba terminando de guardar sus pertenencias en una caja de cartón que llevaría consigo al asilo de ancianos, su nuevo hogar a partir de mañana. Tenía pocos elementos personales, afortunadamente… sin embargo, quería tomarse el tiempo necesario para seleccionar los que conservaría, acariciando con su mirada los recuerdos que cada uno le traía.

Un paquete de viejas cartas amarillentas asomó en un destartalado baúl, atadas con una cinta de raso deslucida, que otrora fuera suave y sedosa. Sonia la desató con suma lentitud y dejó caer ese abanico de momentos grabados en su retentiva desde hacía casi medio siglo… minutos encantados que le habían devuelto el brillo a su mirada, que le habían transmitido un dulce calor, que mantenían viva su esperanza en el amor.

Eran cartas que habían atravesado océanos y mundos distantes, compartidas con un antiguo amigo de su familia, de nombre Javier, a quien ella no había llegado a conocer en persona. Pero su alma -¡oh, sí!-… el alma de Javier había quedado atrapada entre bellas y amables frases que habían hecho suspirar a Sonia en su juventud y la habían enamorado.

Con una lágrima escapando del rabillo de su ojo, releyó fragmentos de esas amadas palabras, con un palpitar añorado que volvía a agitar su pecho cansado y doliente. Recordó entonces un poema que ella le había dedicado antes de enterarse de su muerte… poema que jamás pudo llegar a destino, y lo recitó en voz alta rescatándolo de los confines de su memoria…



Mi dulce amigo, mi ángel tierno,
amor que habitas en mi mente,
conquistarte por siempre quisiera
aunque a mi lado hoy no pueda tenerte…
¿Cómo te diré que de pena muero
cada día por pensarte así…
… pensamiento que transmuta
mi amor en dulce sufrimiento?
Eres el ángel que vela mis sueños,
el que endulza mis momentos
fusionado a mi pensamiento.
Quiero ser tu hada misteriosa,
quiero que me imagines, así…
así como yo te pienso.
Dulce y tierno,
amoroso lucero
que ilumina mi andar
cada día nuevo.
No me conoces… pero te siento…
No te conozco… pero te quiero…
Por ti desovillaré distancias,
atravesaré océanos,
imaginándote mío…
Por ti desafiaré el poder del viento
sólo para decir “Te quiero”.





(Cuento publicado en Relato Completo, Relato Comansi, allá por el 2009, y transmitido hace unos momentos en el programa radial "Sueños de Luna", por Radio Natura Bariloche)

miércoles, 25 de junio de 2014

QUÉDATE A MI LADO (con audio)


Amor mío,

quédate a mi lado

susurrándome al oído.

No te alejes de mis sueños.

Cada día y cada noche

sé mi dueño.

Abrázame muy fuerte,

fundamos nuestros cuerpos

en ardiente hoguera.

Ansío ya tus labios

horadando mi piel

en cada milímetro.

Siénteme toda tuya

con ardoroso fuego

en éxtasis final,

amándonos sin frenos

libres y eternos,

fugitivos de la vida,

en un solo vaivén

del deseo.

Ya sabes que te quiero

y que por tu amor…

vivo y muero.


(Poema de amor publicado en mi libro "Trío Vivo" y que formó parte del programa radial Sueños de Luna)

jueves, 29 de mayo de 2014

ALAS QUEBRADAS


Mis alas repliego de madrugada,
de calmar trato mi afiebrada mente
que al corazón se opone neciamente
y censura a esta tonta ilusionada.

Deseos que alborotan mi mirada
y me lastiman, implacablemente.
Dolor que avanza, tan inútilmente,
y desafía a mi alma, lacerada.

He perdido mis alas primorosas…
No quiero vivir más esta condena,
solo veo espinas en marchitas rosas.

Socava mi fuerza vital la pena.
Sombra taciturna, ¿por qué me acosas?
¿No ves que no hay más sangre ya en mis venas?


sábado, 7 de diciembre de 2013

TE AMO (con audio)


Te amo de un modo inexplicable
Incoherente, desquiciado.
Te amo y punto. No preguntes por qué,
Ni cómo ni cuándo sucedió
Ni razón ni motivo
Solo te amo
Porque mi corazón así lo ha decidido.
Franquear barreras imposibles
Trepar médanos inconsistentes
Lo que surja en el camino
Todo es válido, esto, aquello y más
Porque te amo
No hay razones que lo expliquen
Por eso, no preguntes
Solo siéntelo, acéptalo
Somos uno ya, nada puede impedirlo
Unidos en lo más profundo
Sintiendo desde el más básico
Pero imprescindible amor
Sin preguntas, sin respuestas
Solo sintiéndolo
Adorándonos desde el primer momento
Sin pensar en el mañana
Siendo nosotros
Solo nosotros… dos
Solo dos almas
Fusionadas, enlazadas
Que no podrán ser jamás separadas

Porque nos amamos.


sábado, 23 de noviembre de 2013

"Todas, absolutamente todas las células de su cuerpo se habían contagiado con el virus más poderoso e irracional que podía existir sobre la faz de la Tierra. Y la nube donde había trepado navegaba oronda y sonriente, reproduciendo en cada palmo recorrido los efectos de aquella embriaguez, hasta que no quedó ninguna zona sin contaminar en todo su ser. Se había enamorado completamente, de norte a sur y de este a oeste..."



(fragmento de un texto inconcluso)

lunes, 14 de octubre de 2013

MIL AMANECERES

Desde mi canal de Youtube, dejo este poema mío


lunes, 7 de octubre de 2013

AMIGAS DE NUEVO (con audio)




Recuerdo con un dejo de tristeza aquellos días en que no faltaba ocasión en la que la acompañara en todas sus travesías. Aún recuerdo la caricia de sus dedos y el beso de sus labios en las instancias de mayor conexión. Sin embargo, hace un tiempo que siento cómo me voy secando de a poco, con el único consuelo de alguna parca mirada suya, que no es suficiente para mitigar mi dolor y despertarme de mi largo sueño.

Cada día que pasa deseo que ella quite sus ojos del monitor de su pc y me mire. Pareciera que desde que apareció ese  feo teclado lleno de dientes cuadrados que suele usar para escribir, se ha olvidado de mí. Ni se acuerda de que en un tiempo éramos inseparables compañeras ni de que, hasta latiendo en sus manos, solía despertar su imaginación. Pero aquí está una vez más sin prestarme atención. Solo mira, piensa, espera, inmóvil, con la mirada perdida en un punto lejano de ese frío e inexpresivo monitor. Yo la conozco bien: creo que está tratando de encontrar inspiración.

La observo teclear y detenerse unos instantes, dudosa. Quisiera reclamar su atención de alguna manera eficaz, sin interrumpir su concentración pero de manera elocuente, como antes, cuando mi asistencia era necesaria y valorada.

Luego de minutos eternos, observo que algo en ella se moviliza internamente y la emoción me embarga. Por fin se pone en acción, me toma en su mano derecha y empiezo a latir, con la esperanza renaciente de que ella y yo seamos una sola sobre el papel. Sin embargo, ella se toma su tiempo… me muerde distraída, de a ratos me hace girar entre sus dedos.

¡Ahora sí! La felicidad me invade porque mi sueño comienza a hacerse realidad. Me deslizo danzarina sobre los delgados renglones, bajo la suave presión de sus dedos brillo como si estuviera sobre una pista de gala, luciendo mi mejor traje y regalándole la luminosidad de mi tinta, que es mi propia sangre.

Ella termina de escribir su frase y repara en mi auxilio desinteresado, redescubriéndome. Me besa agradecida y yo le perdono el mordiscón previo, más agradecida aún. 

Somos amigas de nuevo…




viernes, 13 de septiembre de 2013

EL BESO


¿Creíste que no te reconocería? A pesar de haber rasgado mil velos en lejanas vidas, intentando descubrir por qué te apartabas de mí, mientras venías por los demás sin piedad… a pesar de que has sido dura e indiferente a mi demanda, no he dejado de esperar tu esquivo beso. 

Sin embargo hubo veces en que he visto que me mirabas a hurtadillas, oscuramente inalcanzable, dejándome solo y confinado al destierro de la vida eterna.

Ahora que he cumplido mi condena tras largos siglos, siento que te acercas a mí, al fin. Hoy ambos hemos querido encontrarnos. Y aunque no pude ver tu rostro, supe quién eras.

Hoy me has besado de igual a igual y con tu beso comenzó mi descanso. 



sábado, 7 de septiembre de 2013

SOY...

En la esquina de la vida
dejo atrás turbaciones,
mochilas inservibles,
vivencias, penas, dolores.
Miro adelante y sigo.
Futuro incierto
que acobarda
que asusta pero invita.
Paso a paso,
piso el dolor
intento deshacerlo;
a veces quiere volver
a veces vuelve... y tortura...
Pero avanzo
un pie después del otro
me alejo aunque es difícil
me sacudo, me reinvento
me escapo, me evado
me encuentro y lloro.
Y despierto…

Nada es fácil, nada eterno…
dudo, avanzo, pienso,
retrocedo, cedo
pero sigo un paso más.
Me caigo y tropiezo de nuevo,
me perdono, me enderezo.
Pero existo, soy
simplemente mujer
apenas carne y hueso,
una frágil mariposa
que sueña, que vuela,
que huye
de su propio destierro.




lunes, 5 de agosto de 2013

POR VERTE SONREÍR

Envolvería de colores tus sueños,
colgaría de un cometa
la mirada pura de los niños
y así su estela más radiante será…
sólo por verte sonreír...

Perfumaría de azahar
el jardín de tus anhelos,
sembraría flores de esperanza
en tus balcones, de cara al mar,
sólo por verte sonreír..

Y gritaría mil veces “aquí estoy”,
que, aunque lejos,
mil ecos se harán sonrisa
y mil voces tu nombre gritarán,
sólo por verte sonreír...


jueves, 18 de julio de 2013

HUMO Y CENIZAS

El aroma a incienso invadía la habitación, aromatizaba lentamente, la adormecía y la transportaba hacia atrás, hacia deliciosos recuerdos. Se entremezclaba con el olor del café, que a pesar de haber endulzado, se le antojaba amargo.
Quiso desviar el curso de su pensamiento, sin embargo no opuso la debida resistencia y su mente empezó a girar en un túnel de sensaciones plenas, de instantes de éxtasis y de placer, pero también de dolor. Cerró los ojos...

Estaban juntos compartiendo un café y un cigarrillo, abandonados al relax luego del encuentro íntimo, acurrucados y acunados por la lluvia que no cesaba de caer. Ella habría conservado su rictus de satisfacción y bienestar si no hubiera sonado impertinente el celular de Esteban, diluyendo la magia del momento. Si bien ambos habían convenido en no permitir interrupciones externas en esos espaciados encuentros, y aunque ella le decía a Esteban sin palabras que no atendiera, se produjo un quiebre que le hizo anticipar el final ni bien él oprimió la tecla de “aceptar llamada”.

Abrió los ojos. La ceniza hizo equilibrio unos minutos sobre el extremo del incienso, luego cayó deshaciéndose bajo su propio peso, salpicando el platito dispuesto en su base. A esa altura, ya el sopor se había adueñado totalmente de ella, dándole una nueva perspectiva de los acontecimientos.
Pese a eso, no podía dejar de girar hacia atrás mientras sus sensaciones se impregnaban de las cenizas perfumadas que caían, que caían y la hipnotizaban, en tanto que el café se enfriaba, indiferente.


“-Señor, venga urgente para la clínica. Su esposa acaba de tener un accidente”.

El mensaje recibido, que él repetía sin cesar en voz alta, la había dejado estupefacta sobre la cama. Solo atinó a ver cómo él apagaba su cigarrillo y con apuro se ponía el impermeable sin mirarla siquiera. Ella había esperado mucho tiempo un milagro o al menos que Esteban cumpliera su promesa, pero la realidad cayó como un aullido implacable e impiadoso, ensordeciendo el murmullo de la lluvia.

Entonces ella lo supo: Esteban nunca abandonaría a su esposa, hacia quien corría velozmente vestido con las prendas de la culpa, olvidado ya de esa noche de hotel. 

Y allí quedaron el café frío y el incienso despidiendo un humo volátil, pasajero, tan sutil y efímero como ella en la vida de Esteban.





jueves, 11 de julio de 2013

VACILACIONES



El hecho de que se apagaran los ruidos la llevaba a ese inquietante estado en que la oscuridad tomaba el control de su mente. La trémula luz oscilaba mientras se derretía la vela. Y en esa frágil llama veía reflejado su pasado, que por momentos la iluminaba y la encandilaba, pero que también amenazaba con apagarse, al crecer levemente el soplo de su respiración.

¿En qué momento se había disociado su presente de la realidad del resto de los mortales? Prefería no pensar en eso, sino más bien dejar que fluyera esa maraña de momentos que pugnaban por reclamar atención. Ya habría tiempo de analizar, quién sabe...

La vela se iba consumiendo lentamente. No pudo evitar hacer un paralelismo con su propia vida, que sentía apagarse taciturnamente. Pensó que le faltaba el combustible necesario para mantenerla viva y le resultó duro descubrir que ese alimento ya hacía tiempo que se había acabado. Lo tenía todo y a la vez no tenía nada... Paradoja constante que acuciaba su pensamiento en permanente ebullición. Contradictoria realidad. Resbalosa superficie...

De tanto cavilar en soledad sintió frío y no obtuvo respuestas. La vacilante llama fue mermando hasta alcanzar la completa oscuridad, simbiotizada con la oscuridad y el frío de su propia alma. Necesitaba descansar...



lunes, 1 de julio de 2013

MIRADAS


Miradas que encierran misterio.
Miradas que esconden sueños de amor.
Miradas esquivas, desencantadas.
Otras... que destellan dolor.
Conserva el enigma si puedes
pero mírame.
Comparte tu sueño si quieres,
solo  mírame.
No evadas tu mirada.
Irradia tu luz.
No dejes de mirarme
así podré captar
el reflejo de tu ser
tu calor, tu interior
tu sentir, tu sufrir, tu querer.

miércoles, 19 de junio de 2013

LA AVENTURA DE VIVIR


Estoy en un momento especial de mi vida, que si tuviera que definirlo con una sola palabra, lo definiría como CRECIMIENTO.

En esta nueva etapa de introspección y fortalecimiento de mi alma, intento comprenderme para entender cabalmente lo que me sucede.

No me resulta nada fácil, porque traigo un bagaje de cosas vividas del que deberé despojarme primero... sería algo así como alejar las nubes que empañan la luz del sol, para permitir que regrese la claridad.

Estoy aprendiendo que mis posibilidades son infinitas y mi mundo, inmenso. Sé que si no fuera por mis sueños, no habría llegado hasta donde llegué, con mis aciertos y con mis errores, algunos de los cuales me han dado momentos de intensa felicidad, ¿para qué negarlo?

Estoy aprendiendo a convivir con todo eso, y principalmente, a dejar de criticarme para amarme de verdad. En mi vida tuve muchos vaivenes y diferentes estados de ánimo... situaciones muy duras y dolorosas por las cuales acumulé toneladas de culpa y sufrimiento, que necesito echar definitivamente a la basura.

En esa tarea me encuentro. En mi propia búsqueda. En mi propia valoración. Sé que me desvaloricé, me lastimé y me dejé lastimar, fui ingenua, infantil, soñadora... creí que TODO era posible, en fin, soñé sin límites buscando el otro lado del arco iris... hiriendo a mi propio corazón, sin saberlo entonces.

Pero también sé que recopilé mucho cariño de personas que se acercaron desinteresadamente a mí y me brindaron su apoyo y su calor constante.

No puedo sino estar completamente agradecida con todos ellos, sentir la infinitud del amor que se da con generosidad. Quisiera retribuirlo de algún modo y tal vez lo consiga... abriéndome lo suficiente para que salga ese rayo de luz de mi corazón que hable por mí, que me exima de buscar las palabras que no sé pronunciar, o que sean lo suficientemente representativas de mi verdadero sentir.

Tomando nuevos bríos, me lanzo a la nueva aventura que se abre ante mí: la aventura de VIVIR.

viernes, 14 de junio de 2013

HOY VINE


Hoy vine a abrir las ventanas
para que corra aire nuevo,
para que el calor del sol
inunde este espacio poético
surgido del corazón...

Hoy vine a soltar con ansias
coloridas mariposas,
que alegren la habitación,
la llenen de luz, de brillo,
y de esperanzas de amor...

Hoy vine a tender mis manos
para que te tomes de ellas,
te transmitan mi ilusión,
mi optimismo, mi fuerza,
y te envuelva su calor.

Hoy vine a ofrecerte un beso
y un abrazo desde el alma
con mis alas desplegadas,
que a pesar de la distancia
te haga oír mi corazón...